La justificación de la
utilización del forraje verde hidropónico, en las raciones para el ganado, se
basa en los enormes cambios que se experimentan, en la composición del grano de
cebada, durante la germinación.Durante el proceso de
germinación de la cebada, el almidón se transforma en azúcares libres, que son
mejor utilizados por el animal, al igual que ocurre con la proteína de la
semilla, transformada en péptidos y aminoácidos libres.La cantidad de proteína que
incluye el forraje verde hidropónico es de un 16,8% sobre materia seca, o bien
32 gramos por kilo de materia fresca. Esta proteína se encuentra en estado de
formación, con una considerable proporción en forma de cadenas cortas. De este
modo, es más accesible para los microorganismos ruminales por lo cual, la
incorporación como proteína microbiana es más rápida, consiguiéndose una mejor
digestibilidad
Al tratarse de plantas en estado
de germinación y crecimiento, el contenido en vitaminas es muy superior al de
la semilla como tal, encontrándose en forma soluble siendo por tanto más
fácilmente asimilables.
La vitamina E, se encuentra en estado completamente asimilable y en libre circulación
por toda la planta joven, mientras que en el grano seco se presenta en la envoltura
cuticular y es expulsado por los animales en los excrementos. En análisis de
laboratorio se ha comprobado que las deyecciones de los animales alimentado con
forraje verde, no existía vitamina E, lo que demuestra su completa asimilación. La vitamina E, tiene una gran importancia para la FERTILIDAD de los animales
La vitamina C, pieza clave en
todo el sistema vitamínico, que reemplaza a la vitamina A en caso de
deficiencia, actúa en los epitelios germinativos, mostrando su valor en los
reproductores. Por su acción sobre la ante-hipófisis, activa la reacción de las
hormonas estimulantes de las glándulas digestivas del páncreas, estómago e
intestino.
El contenido en carotenos (pro
vitamina A), por ejemplo, pasó de ser nulo en el grano, a 45.136 ppm.
Otros principios que aporta el
forraje verde hidropónico, son enzimas y factores de crecimiento que influyen
en una mejor y mayor utilización del resto de nutrientes, que se incluyen en la
ración.
El análisis de laboratorio,
practicado sobre materia seca, no considera el valor energético utilizable de
un cuerpo vivo en evolución biológica acelerada, destinado a ser consumido en
fresco y cuya acción de catálisis sobre los restantes elementos de la ración,
solamente se puede comprobar experimentalmente por el método de equivalencia
real por sustitución. El análisis químico del forraje hidropónico, muestra que
la energía que éste aporta por kilo de materia fresca, es de 0,25 U.F. No
obstante a la hora de racionar, es más preciso usar el valor 0,4 U.F. por el
efecto asociativo que muestra con los alimentos fibrosos. Se comprueba que el
consumo voluntario de paja aumenta en función directa a la cantidad de forraje
hidropónico que se incluya en la ración, siendo esta mejor aprovechada por los
animales.
En definitiva aumenta la
asimilación del resto de los componentes que le acompañan en la ración.
La velocidad de tránsito por el
aparato digestivo, se ve incrementada por el efecto de una mejor y más completa
fermentación en el rumen, al verse estimulado el desarrollo de la flora
microbiana por la carga enzimática del forraje verde hidropónico.
Otra particularidad que ofrece
la ración al incluirse en ella el forraje hidropónico, es la menor utilización
de piensos concentrados, en parte por actuar por sí mismo como concentrado, y
en parte por el incremento en la utilización de forraje bastos, al aumentar su
coeficiente de digestibilidad.
La incorporación de forraje
verde hidropónico, en la ración, se ve reflejada en los animales, en un
incremento de la producción láctea, paralelo a un aumento en el contenido en
grasa, consecuencia del aumento de consumo de fibra.
Otro efecto notorio, es el mejor
estado sanitario de los animales, presentando al mismo tiempo y como
consecuencia de ello, un mejor aspecto exterior.
La carga vitamínica, influye de
manera decisiva en el proceso reproductivo, consiguiéndose celos más claros,
mejorando considerablemente la fertilidad y fecundidad de las hembras.
La producción y cultivo del
forraje hidropónico en un ambiente controlado, permite la obtención de éste de
manera constante a lo largo de todo el año, y lo que es más importante, con
unas características y composición fijas. Ello permite, que la composición de
la ración, sea prácticamente constante, evitando los desarreglos digestivos que
se producen cuando hay cambios de materias primas en la ración.
Por otro lado, al tratarse el
forraje verde hidropónico, de un alimento poco fibroso y de sabor agradable
para el animal, este muestra una gran apetecibilidad por él, comiéndolo con
avidez, y dando a sus mezclas idénticas características.